Es hora de que ustedes desnuden sus almas y paladares, confesando qué antojos gustativos dominan sus apetitos chacales y les exponen a la ruina social. Si puedes generar empatía por quienes chopean papas fritas en malteadas, beben Redneck Mimosas o no tienen empacho en clavarle Doritos a Twinky para crear un Twinkigosaurio… eres nuestra clase de persona.